Estados Unidos condenó las amenazas lanzadas por Rusia en los últimos días sobre un conflicto con la OTAN si ésta permite a Ucrania usar sus misiles de largo alcance contra su territorio y tildó “este tipo de retórica” como “increíblemente peligrosa”. Las palabras de la portavoz Karine Jean-Pierre se dieron poco antes de que comenzara una reunión en la Casa Blanca entre el presidente Joe Biden y el primer ministro británico, Keir Starmer, en la que se abordó esta cuestión, entre otras, a la que le siguió una declaración del mandatario, que dijo que “no pienso mucho en Vladimir Putin”, desestimando así sus dichos.
Ucrania lleva tiempo pidiendo a los aliados que le permitan usar sus misiles de largo alcance -especialmente los ATCAMS estadounidenses y los Storm Shadow británicos- contra bases militares en Rusia, desde donde las Fuerzas Armadas lanzan sus ataques. “Cualquiera que vea en el mapa desde dónde lanza Rusia sus ataques, dónde entrena a sus tropas, mantiene a sus reservas y sitúa sus infraestructuras militares entiende claramente por qué Ucrania necesita capacidades de larga distancia”, dijo Volodimir Zelensky durante un foro sobre seguridad celebrado en Kiev.