El exfuncionario tenía 79 años y falleció en su domicilio, según pudo confirmar Infobae. Fue el primer ministro de Obras Públicas del gobierno menemista e ideólogo de las privatizaciones.
Dromi, que comandó el Ministerio de Obras Públicas entre julio de 1989 y enero de 1991, fue el principal artífice jurídico de las privatizaciones de la década de 1990, que abarcaron sectores como telecomunicaciones, ferrocarriles y energía. En 1989, junto a Rodolfo Barra (actual Procurador del Tesoro del gobierno de Milei) redactó la Ley 23.696 de Reforma del Estado, que permitió la venta de las empresas estatales YPF, ENTel y Ferrocarriles Argentinos. En 1990, durante una entrevista con la revista Gente, defendió las privatizaciones, que calificó como un “un instrumento” porque, explicó “no somos rematadores del Estado”.
“Significa que pasamos bienes del sector público al privado: para dinamizar la producción. Para que Doña Rosa no soporte más un estado ineficiente y para disminuir el déficit fiscal”, agregó el por entonces ministro. En 1993, tras dos años como embajador argentino ante España, asumió como secretario de Estado para la Reforma del Derecho de la Nación Argentina, cargo que ocupó hasta 1997.