Se trata de un Challenger 300, perteneciente a la familia Brito, que regresaba de un viaje a Punta del Este. Las dos víctimas eran las únicas personas a bordo. Hubo vecinos evacuados.
Un avión privado se despistó este mediodía cuando intentaba aterrizar en el aeropuerto de San Fernando y se prendió fuego luego de impactar en una zona de viviendas, informaron testigos minutos después del accidente. Como consecuencia del despiste murieron el piloto y el copiloto, únicos tripulantes.
El avión cayó en la intersección de José Terry y Charlín, una calle lindera al aeropuerto de San Fernando. El sitio está poblado de casas bajas y había vecinos circulando en el lugar.
Los investigadores del accidente también están evaluando cómo fueron las primeras tareas de emergencia. Fuentes aeroportuarias aseguran que los Bomberos tardaron al menos siete minutos en llegar al lugar en donde se produjo el impacto. Además, no tenían los elementos necesarios para abrir la cabina y rescatar a los pilotos. “Si hubieran llegado antes y con los elementos adecuados, probablemente estaríamos hablando de otro desenlace”, explicaron especialistas en la materia.
La aeronave involucrada es un Challenger 300, matrícula LV-GOK, perteneciente a la familia de Jorge Brito, dueño del Banco Macro y presidente de River. Había realizado un viaje a Punta del Este y regresaba a Buenos Aires.